¿Qué pasó en Sinaloa durante 2025? La guerra entre facciones del Cártel de Sinaloa ha cobrado la vida de 58 policías y ha provocado más de 2,100 homicidios desde septiembre de 2024, en un conflicto marcado por una escalada de violencia que mantiene en alerta a todo el estado.
La narcoguerra enfrenta principalmente a dos grupos rivales ligados al Cártel de Sinaloa: los Chapitos, herederos del liderazgo de Joaquín El Chapo Guzmán, y La Mayiza, vinculados a la familia de Ismael El Mayo Zambada. Esta pugna por el control territorial ha generado un clima de inseguridad alarmante que afecta tanto a las fuerzas de seguridad como a la población civil.
La violencia se ha concentrado fundamentalmente en Culiacán, aunque también se extiende a otros municipios sinaloenses. Entre los policías asesinados hay elementos activos, jubilados y en descanso de corporaciones municipales, estatales y federales, que han sido blanco constante de ataques. Además, se han registrado más de 1,800 desapariciones forzadas, evidenciando la gravedad del problema.
Desde el inicio del conflicto, Sinaloa ha experimentado un aumento del 200% en la tasa de homicidios dolosos. Esta ola criminal ha trastocado la vida diaria, impactando la economía local y generando desplazamientos, temor y desconfianza hacia las instituciones. La persistencia de la violencia a pesar del despliegue de más de 14,000 elementos federales refleja la complejidad del desafío.
A pesar de los operativos conjuntos a nivel federal, estatal y municipal, la violencia relacionada con el Cártel de Sinaloa continúa sin mostrar signos de disminución. Los ataques a policías y la fortaleza del crimen organizado siguen siendo un reto crítico que requiere una estrategia integral y sostenida para restaurar la paz y seguridad en la región.
La situación en Sinaloa es un llamado urgente a reflexionar sobre las políticas de seguridad y su impacto en la sociedad. Para comprender mejor la evolución de este conflicto y sus repercusiones, sigue nuestra cobertura completa en la sección de Sinaloa.