El gobierno del estado de Campeche, encabezado por la gobernadora Layda Sansores, anunció la expropiación de tres terrenos vinculados a Alejandro "Alito" Moreno, dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Estos predios, que suman más de siete hectáreas, estaban registrados a nombre de la madre de Moreno, Yolanda Mercedes Cárdenas, y de su arquitecto Juan José Salazar.
Los terrenos fueron declarados de utilidad pública tras la reciente aprobación de una nueva Ley de Expropiaciones en Campeche. La administración estatal argumenta que la adquisición de estos inmuebles se realizó mediante prácticas ilícitas relacionadas con corrupción y lavado de dinero. Esta acusación ha recibido respaldo público de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien señaló que dichas propiedades fueron compradas con recursos de procedencia ilegal y propuso destinarlas para la construcción de una Universidad del Bienestar, enfocada en ampliar la educación superior en la región.
En contraparte, Alejandro Moreno calificó la expropiación como un acto ilegal motivado por una persecución política. Anunció que recurrirá a las instancias legales correspondientes para impugnar la medida y advirtió que esta acción intenta "doblarlo" políticamente. Moreno comparó el episodio con una maniobra que busca transformar la situación política de México a un modelo similar al de Venezuela.
Este hecho agrava la histórica confrontación entre Layda Sansores y Alejandro Moreno, quienes han protagonizado múltiples disputas públicas y acusaciones mutuas de corrupción durante los últimos años, reflejando una fuerte tensión política en Campeche y a nivel nacional.
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